La resistencia que muchos tienen con la Palabra de Dios es, en realidad, resistencia a un cambio de vida.
Las personas piensan que la ignorancia de la verdad les permite convivir con sus errores, PERO, Dios sabe que la realidad es que NO TIENEN OÍDOS para Él… Y si no quieren oírlo, tampoco quieren tener una relación con Él.
Piensan que pueden fingir conocerlo, mientras practican «buenas obras» y despistan a tantas personas como ellas. Es algo triste.
Dios lo ve todo… Él sabe por qué hacemos lo que hacemos, no sirve de nada engañarse a sí mismo.
