«Los problemas económicos y familiares me llevaron a refugiarme en fiestas, amigos y un estilo de vida oscuro. Me volví rebelde, consumía drogas, practicaba el cutting, tenía serios problemas con el alcohol e incluso intenté acabar con mi vida.
Aunque terminé mi carrera en derecho, no tenía la independencia económica que deseaba, apenas solventaba mis gastos. Al mirarme al espejo pensaba: “no soy nada de lo que quería ser”.
Cansada de vivir así, acepté la invitación de mi padre para ir al Universal. Al conocer la Palabra de Dios y hacer un pacto con Él, me alejé de los vicios y seguí Su orientación. No fue fácil, pero conforme maduraba espiritualmente, también empecé a avanzar profesional y económicamente.
Actualmente disfruto de lo que tanto anhelaba: trabajo en el área legal de una empresa transnacional, tengo mi propia empresa y un carro. Sin embargo, la mayor bendición no es material, sino el Espíritu Santo. Él es quien me ayuda a continuar libre de todo mal.
Tristemente, varias personas de mi pasado perdieron la vida, terminaron en la cárcel o perdidos en el vicio. Estoy segura de que, sin Dios, yo habría tenido el mismo destino, pero gracias a Su amor, hoy me miro al espejo y veo a la persona que siempre quise ser.» -Maribel García
Alianza con Dios
Si deseas darle un nuevo sentido a tu carrera, la mejor opción es hacer una alianza con el Señor. Para ello, te invitamos a participar todos los lunes con todas tus fuerzas en la reunión de Prosperidad con Dios, especialmente a las 7 p. m., en el Templo de los Milagros, Av. Revolución núm. 253, col. Tacubaya. O bien, acude a la Universal más cercana.
