«Me mandaron pastillas de por vida» 

«Por 15 años sufrí una alergia que me provocaba ronchas con dolor y comezón; se agravó tanto que se me hinchaba la cara, las manos y otras partes del cuerpo, tanto que a veces no podía agarrar cosas. Los especialistas nunca hallaron la causa, solo me mandaron pastillas de por vida. Me daba mucha pena que me vieran así, pues la alergia aparecía de un momento a otro. Por mi baja autoestima me refugié en el cigarro y alcohol.

Pensé que no había solución, pero, como en la Universal mi mamá fue curada de cirrosis, creí que yo también podía sanar. Asistí y aprendí que a través de la fe y la obediencia a la Palabra de Dios, Jesús sería la puerta de entrada para mi sanidad. Entonces comencé a beber del agua consagrada, creyendo en el poder del Señor. A la par, encontré fuerzas en las oraciones para alejarme de las conductas que me dañaban.

No fue de la noche a la mañana, pero, perseverando con fe, las ronchas dejaron de aparecer y ya no tuve que tomar pastillas. Ahora soy una persona feliz, no dependo de vicios y estoy totalmente sana.» -Alma García

Reunión de Sanidad

Si estás pasando por una enfermedad, sea cual sea, puedes hacer uso de tu fe para determinar el bienestar de tu salud.

Te invitamos a participar en la Reunión de Sanidad. El encuentro tiene como objetivo enseñar a las personas a usar su fe para cambiar su situación de salud. Te esperamos todos los martes, especialmente a las 7 p. m., en la Universal más cercana.

(*) La Universal aclara que todos los conceptos emitidos en este sitio web, así como la programación de radio y de televisión, son cuestiones de fe, en modo alguno deben ser interpretados como elementos con atribuciones terapéuticas, sin demérito de la medicina, ni de quienes la practican. NO DEJES DE CONSULTAR A TU MÉDICO.