«Bendito es el hombre que confía en el Señor, cuya confianza es el Señor. Será como árbol plantado junto al agua, que extiende sus raíces junto a la corriente; no temerá cuando venga el calor, y sus hojas estarán verdes; en año de sequía no se angustiará ni cesará de dar fruto.
Más engañoso que todo es el corazón, y sin remedio; ¿quién lo comprenderá? Yo el Señor, escudriño el corazón, pruebo los pensamientos, para dar a cada uno según sus caminos, según el fruto de sus obras.»
Jeremías 17:7-10
Extraído del blog del Obispo Macedo
Medita también en este mensaje: EL REINO DE DIOS ES UN REINO DE JUSTICIA, ORDEN Y DISCIPLINA