“EL QUE PRACTICA EL PECADO ES DEL DIABLO, porque el diablo ha pecado desde el principio. El Hijo de Dios Se manifestó con este propósito: para destruir las obras del diablo. NINGUNO QUE ES NACIDO DE DIOS PRACTICA EL PECADO, porque la simiente de Dios permanece en él; y no puede pecar, porque es nacido de Dios.
En esto se reconocen los hijos de Dios y los hijos del diablo: todo aquel que no practica la justicia, no es de Dios; tampoco aquel que no ama a su hermano”.
1 Juan 3:8-10
Extraído del blog del Obispo Macedo
Medita también en este mensaje: Quien no nace de Agua y del Espíritu Santo no entra en el Cielo