«Cuando mi marido se fue me dejó sin nada» 

«Caí en una depresión muy fuerte cuando me separé de mi esposo. Dependía económicamente de él, cuando se fue me dejó sin nada, no sabía qué hacer porque nunca trabajé, mis papás y mis hermanos me ayudaban para sobrevivir. Me sentía frustrada y comencé a beber mucho alcohol; también descuidé a mi hijo, no me di cuenta de que él consumía drogas. En una ocasión intenté quitarme la vida tomando pastillas, pero en el hospital me hicieron un lavado de estómago y me salvé. 

Asistí a la Universal porque quería tener un cambio de vida. Como mi necesidad era económica, fue lo primero que busqué. Le pedí con fe que me ayudara a prosperar y prometí honrarlo toda mi vida. No pasó mucho tiempo, noté que prosperaba y tuve visión para emprender 2 negocios. Me mantuve perseverando y mi hijo dejó las drogas, incluso ahora es ingeniero en sistemas computacionales. Solo que, a pesar de estar bien económicamente, por momentos sentía mucha tristeza y ansiedad. Ahí entendí lo que me faltaba: el Espíritu Santo, pues sin Él no tendría tranquilidad, paz ni felicidad. Entonces, para recibirlo, dejé todo lo que no agradaba a Jesús, como mi mal carácter, guardar resentimiento, porque el Espíritu Santo no puede habitar en un corazón sucio, busqué ser como Dios y puse en mis pensamientos darles amor a mis semejantes. 

Aunque me costó mucho trabajo, me mantuve en obediencia y dejé el vicio y mis malas amistades. Desde que recibí Su presencia, ahora solo vivo para Él, y Su Espíritu Santo me da mucha alegría y tranquilidad. No faltan problemas, quizás al momento me molesto, pero Dios me da el entendimiento para cambiar mi carácter, no tengo por qué angustiarme porque Él tiene el control de mi vida. Me siento agradecida en todos los aspectos, me había separado de mi esposo durante 15 años, incluso estuvo en la cárcel, pero Dios obró y ahora está libre; regresó a la casa y va conmigo a la Universal, tenemos una familia restaurada. Dios nos da todo, solo debemos buscarlo con fe.» -Mirna Roa 

Reunión del Espíritu Santo

Esta historia nos revela el secreto para lograr una vida nueva: el Espíritu de Dios.

¿Los problemas se acabarán de un día para el otro? No… Pero todo aquel que recibe el Poder de Dios no se deja derribar ante cualquier situación. Su presencia brinda alegría y paz continuas.

Pero ¿cómo recibirlo en tu vida?

Aprende más todos los domingos en la Reunión del Espíritu Santo.

Te esperamos este 4 de agosto, especialmente a las 10 a. m., en el Templo de los Milagros: Av. Revolución # 253, col. Tacubaya. O bien, haz clic aquí para encontrar la Universal más cercana a tu domicilio.